domingo, 18 de diciembre de 2011

Puro Teatro ( La Lupe )


Igual que en un escenario
finges tu dolor barato
tu drama no es necesario
yo conozco ese teatro.

Mintiendo
que bien te queda el papel
después de todo parece
que esa es tu forma de ser .

Yo confiaba ciegamente
en la fiebre de tus besos, 
mentiste serenamente
y el telón cayó por eso.

- Teatro -

Lo tuyo es puro teatro,
falsedad bien ensayada
estudiado simulacro,
fue tu mejor actuación
destrozar mi corazón .

Y hoy que me lloras de veras
recuerdo tu simulacro,
perdona que no te crea
me parece que es teatro. 

Y acuérdate
que según tu punto de vista
yo soy la mala....

- Aaayyy-

- Teatro -

Lo tuyo es puro teatro,
falsedad bien ensayada
estudiado simulacro,
fue tu mejor actuación
destrozar mi corazón .

Y hoy que me lloras de veras
recuerdo tu simulacro,
perdona que no te crea
me parece que es teatro.
 
Yo confiaba ciegamente
en la fiebre de tus besos
mentiste serenamente
y el telón cayó por eso.
Perdona que no te crea
me parece que es teatro
Pero perdona que ya no te crea
me parece que es teatro.

Lo tuyo.

Lo tuyo es puro teatro.





Deixis en Fantasma ( Ángel González )



Aquello.
No eso.
Ni
-mucho menos- esto.
Aquello.
Lo que está en el umbral
de mi fortuna.
Nunca llamado, nunca
esperado siquiera;
sólo presencia que no ocupa espacio,
sombra o luz fiel al borde de mí mismo
que ni el viento arrebata, ni la lluvia disuelve,
ni el sol marchita, ni la noche apaga.
Tenue cabo de brisa
que me ataba a la vida dulcemente.
Aquello
que quizá hubiese sido
posible,
que sería posible todavía
hoy o mañana si no fuese
un sueño.
 
 
 
 
 

jueves, 15 de diciembre de 2011

El Títere ( Letra: Jorge Luis Borges- Música: Astor Piazzolla )


A un compadrito le canto
que era el patrón y el ornato
de las casas menos santas
del barrio de Triunvirato.

Atildado en el vestir,
medio mandón en el trato;
negro el chambergo y la ropa,
negro el charol del zapato.

Como luz para el manejo.
Le marcaba un garabato
en la cara al más garifo,
de un solo brinco, a lo gato.

El hombre, según se sabe,
tiene firmado un contrato
con la muerte. En cada esquina
lo anda acechando el mal rato.

Ni la cuartiada ni el grito
lo salvan al candidato.
La muerte sabe, señores,
llegar con sumo recato.

Un balazo lo paró
en Thames y Triunvirato.
Se mudó a un barrio vecino:
el de la quinta del ñato.

Bailarín y jugador,
no sé si chino o mulato.
Lo mimaba el conventillo;
que hoy se llama inquilinato.

A las pardas zaguaneras
no les resultaba ingrato
el amor de ese valiente
que les dio tan buenos ratos.





domingo, 11 de diciembre de 2011

Balada Para Un Loco ( Astor Piazzolla )


Las tardecitas de Buenos Aires tienen ese que se yo, ¿ viste?
Salgo de casa por Arenales, lo de siempre en la calle y en mi...
Cuando, de repente, detrás de un árbol, se aparece él.
Mezcla rara de penúltimo linyera
y de primer polizonte en el viaje a Venus.
Medio melón en la cabeza,
las rayas de la camisa pintadas en la piel,
dos medias suelas clavadas en los pies
y una banderita de taxi libre levantada en cada mano.
Parece que sólo yo lo veo,
Porque él pasa entre la gente y los maniquíes le guiñan,
los semáforos le dan tres luces celestes
y las naranjas del frutero de la esquina
le tiran azahares.
Y así, medio bailando y medio volando,
se saca el melón, me saluda,
me regala una banderita y me dice:


Ya sé que estoy piantao, piantao, piantao...
No ves que va la luna rodando por Callao,
que un corso de astronautas y niños, con un vals,
me baila alrededor... ¡Bailá! ¡Vení! ¡Volá!


Ya sé que estoy piantao, piantao, piantao...
Yo miro a Buenos Aires del nido de un gorrión
y a vos te vi tan triste... ¡Vení! ¡Volá! ¡Sentí!...
el loco berretín que tengo para vos.


¡Loco! ¡Loco! ¡Loco!
Cuando anochezca en tu porteña soledad,
por la ribera de tu sábana vendré
con un poema y un trombón
a desvelarte el corazón.


¡Loco! ¡Loco! ¡Loco!
Como un acróbata demente saltaré,
sobre el abismo de tu escote hasta sentir
que enloquecí tu corazón de libertad...
¡Ya vas a ver!


Y así diciendo, el loco me convida
a andar en su ilusión super-sport.
Y vamos a correr por las cornisas
¡con una golondrina en el motor!


De Vieytes nos aplauden: "¡Viva! ¡Viva!",
los locos que inventaron el Amor,
y un ángel y un soldado y una niña
nos dan un valsecito bailador.


Nos sale a saludar la gente linda...
Y loco, pero tuyo, ¡qué sé yo!:
provoca campanarios con su risa,
y al fin, me mira, y canta a media voz:


Quereme así, piantao, piantao, piantao...
Trepate a esta ternura de locos que hay en mi,
ponete esta peluca de alondras, ¡y volá!
¡Volá conmigo ya! ¡Vení, volá, vení!


Quereme así, piantao, piantao, piantao...
Abrite los amores que vamos a intentar
la mágica locura total de revivir...
¡Vení, volá, vení! ¡Trai-lai-la-larará!


¡Viva! ¡Viva! ¡Viva!
Loco él y loca yo...
¡Locos! ¡Locos! ¡Locos!
¡Loco él y loca yo...



jueves, 8 de diciembre de 2011

Unidos Por La Luz ( José María Hinojosa )

  
Bajo una misma luz 
están nuestras cabezas.

Tu corazón y el mío 
cantan sobre las piedras 
cuando la noche oculta 
los rugidos de fieras.

¿Tu corazón y el mío eran sólo de arena?
Por el desierto arrastran los camellos sus penas 
y llevan en sus ojos oasis de palmeras.

¿Tú corazón y el mío 
eran sólo de arena?

Por el desierto arrastran
los camellos sus penas
y llevan en sus ojos
oasis de palmeras.

¿Tu corazón y el mío
eran sólo de arena?

Nuestras sombras unidas 
florecen en la tierra. 
  
 

domingo, 4 de diciembre de 2011

La Última Flor Del Otoño de Edith Södergran. Versión de Renato Sandoval e Irma Sítanen


Yo soy la última flor del otoño.
Fui mecida en la cuna del verano,
fui puesta en guardia contra el viento del norte,
rojas llamas florecieron
en mis albas mejillas.

Yo soy la última flor del otoño.


Soy la simiente más joven de la primavera difunta,
es tan fácil ser la última en morir:
he visto el lago tan mágico y azul,
he oído latir el corazón del verano difunto,
mi cáliz sólo contiene la semilla de la muerte.


Yo soy la última flor del otoño.


He visto sus profundidades estelares,
he contemplado la luz de cálidos hogares lejanos,
es tan fácil seguir la misma senda,
cerraré las puertas de la muerte.


Yo soy la última flor del otoño.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Tránsito ( Leopoldo de Luis)

 
 
Como la música del tiempo
suena tu paso próximo. Resbala
tu sombra cual los días en fluyente
transitar por mis surcos, como un agua.

Flotamos en el tiempo, en el continuo
ir del río. Nos lleva. Nos desgasta
lentamente. Nos suena honda en el pecho
la rota frialdad de su cascada.

Fuimos de abril. Teníamos
una luz inefable, como un ala.
Flor o pájaro o nombre
del amor, en el sueño y en la rama.

Fuimos también de mayo. Dulcemente
el mirar como un fruto se doraba
de presagios. Madura y entreabierta
la fresca pulpa en que el besar se abrasa.

El estío nos hizo arena ardiente,
carne encendida de besada playa
donde blancos caballos como espuma
por la sangre de agosto se avalanzan.

Como cuerpos de otoño nos amamos
bajo la luz dulcísima y dorada
y sentimos el cobre de noviembre
de hermosura sonar en nuestras almas.

Cuánto diciembre acude, cuánto enero
cerca del amor, la vida, la esperanza.
Por la nieve tus pasos cómo suenan
a rosas deshojadas.

Somos de tiempo, Soledad y tiempo
nos vuelven sombra y nada.
 
 
 
 

En Tus Ojos ( Francisco Onieva)


Lo que veo en tus ojos
es el vacío de una ausencia,
es la luz azufrada,
detrás de la colina,
de un sol envejecido,
que agranda la alameda
y echa la llave
del horizonte.


Lo que veo en tus ojos
son las piedras heladas de las lindes,
las ramas doloridas de los álamos
-también sienten el frío-,
es el silencio
que en tus palabras se oye,
es la honda humanidad
de la luz de diciembre.

Último Brindis ( Nicanor Parra) ( Premio Cervantes 2011)

 
Lo queramos o no
sólo tenemos tres alternativas:
el ayer, el presente y el mañana.

Y ni siquiera tres
porque como dice el filósofo
el ayer es ayer
nos pertenece sólo en el recuerdo:
a la rosa que ya se deshojó
no se le puede sacar otro pétalo.

Las cartas por jugar
son solamente dos:
el presente y el día de mañana.

Y ni siquiera dos
porque es un hecho bien establecido
que el presente no existe
sino en la medida en que se hace pasado
y ya pasó...
como la juventud.

En resumidas cuentas
sólo nos va quedando el mañana:
yo levanto mi copa
por ese día que no llega nunca
pero que es lo único
de lo que realmente disponemos.
 
 
 


martes, 22 de noviembre de 2011

Desde Fuera ( Francisca Aguirre )


¿Quién sería el extraño que quisiera
conocer un paisaje como éste?
Desde fuera, la isla es infinita:
  una vida resultaría escasa
para cubrir su territorio.

Desde fuera.

Pero Ítaca está dentro, o no se alcanza.
¿Y quién querría descender al fondo
de un silencio más vasto que el océano?
Silencio son sus habitantes,
silencio y ojos hacia el mar.

Desde fuera
las aguas son caminos
¿desde la playa son sólo frontera?.
¿Y quién sería el torpe navegante
que entraría en un puerto sin faro?

Desde fuera, los dioses nos contemplan.

Desde aquí, no hay un pecho
capaz de cobijarlos:
los dioses son palabras; con el silencio, mueren.
¿Alguna vez la isla fue distinta?

Quién lo puede saber desde el aturdimiento.
Sin palabras, sin dioses, Ítaca es sólo el mar.



La Sombra de Mi Alma ( Federico García Lorca )



La sombra de mi alma
huye por un ocaso de alfabetos,
niebla de libros
y palabras.

¡La sombra de mi alma!

He llegado a la línea donde cesa
la nostalgia,
y la gota de llanto se transforma
alabastro de espíritu.

(¡La sombra de mi alma!)

El copo del dolor
se acaba,
pero queda la razón y la sustancia
de mi viejo mediodía de labios,
de mi viejo mediodía
de miradas.

Un turbio laberinto
de estrellas ahumadas
enreda mi ilusión
casi marchita.

¡La sombra de mi alma!

Y una alucinación
me ordeña las miradas.
Veo la palabra amor
desmoronada.

¡Ruiseñor mío!
¡Ruiseñor!
¿Aún cantas? 



jueves, 10 de noviembre de 2011

Amar ( Salvador Novo )



"Amar es este tímido silencio
cerca de ti, sin que lo sepas,
y recordar tu voz cuando te marchas
y sentir el calor de tu saludo.

Amar es aguardarte
como si fueras parte del ocaso,
ni antes ni después, para que estemos solos
entre los juegos y los cuentos
sobre la tierra seca.

Amar es percibir, cuando te ausentas,
tu perfume en el aire que respiro,
y contemplar la estrella en que te alejas
cuando cierro la puerta de la noche. "



miércoles, 9 de noviembre de 2011

Adiós ( Gabriela Mistral )



En costa lejana
y en mar de Pasión,
dijimos adioses
sin decir adiós.

Y no fue verdad
la alucinación.
Ni tú la creíste
ni la creo yo,
«y es cierto y no es cierto»
como en la canción.

Que yendo hacia el Sur
diciendo iba yo:
«Vamos hacia el mar
que devora al Sol».
Y yendo hacia el Norte
decía tu voz:
«Vamos a ver juntos
donde se hace el Sol».

Ni por juego digas
o exageración
que nos separaron
tierra y mar, que son
ella, sueño y el
alucinación.

No te digas solo
ni pida tu voz
albergue para uno
al albergador.

Echarás la sombra
que siempre se echó,
morderás la duna
con paso de dos...

Para que ninguno,
ni hombre ni dios,
nos llame partidos
como luna y sol;
para que ni roca
ni viento errador,
ni río con vado
ni árbol sombreador,
aprendan y digan
mentira o error
del Sur y del Norte,
del uno y del dos!



lunes, 7 de noviembre de 2011

Equilibrio (El Atrapador de Sueños)

El equilibrio
de la sonrisa
es tan frágil
como la escarcha
como los hilos
que mueven
las manos
agrietadas
del aire.

En tu presencia
conjuro
cualquier temor
y cierro los ojos
en la certeza
del tiempo
detenido
en la luz
y en los labios
de todas
Las Palabras.
 



domingo, 6 de noviembre de 2011

Gota Pequeña, Mi Dolor ( Dámaso Alonso)


Gota pequeña, mi dolor.
La tiré al mar.
                            Al hondo mar.

Luego me dije: ¡A tu sabor
ya puedes navegar!
Más me perdió la poca fe...
                                                  La poca fe
de mi cantar.

Entre onda y cielo naufragué.

Y era un dolor inmenso el mar.




La Poesía es un Atentado Celeste ( Vicente Huidobro)

 
Yo estoy ausente, pero en el fondo de esta ausencia
Hay la espera de mí mismo
Y esta espera es otro modo de presencia
La espera de mi retorno
Yo estoy en otros objetos
Ando en viaje dando un poco de mi vida
A ciertos árboles y a ciertas piedras
Que me han esperado muchos años.

Se cansaron de esperarme y se sentaron.

Yo no estoy y estoy
Estoy ausente y estoy presente en estado de espera
Ellos querrían mi lenguaje para expresarse
Y yo querría el de ellos para expresarlos
He aquí el equívoco, el atroz equívoco.

Angustioso lamentable
Me voy adentrando en estas plantas
Voy dejando mis ropas
Se me van cayendo las carnes
Y mi esqueleto se va revistiendo de cortezas.

Me estoy haciendo árbol. Cuántas veces me he ido convirtiendo
            en otras cosas...
Es doloroso y lleno de ternura.

Podría dar un grito pero se espantaría la transustanciación.
Hay que guardar silencio. Esperar en silencio.



jueves, 20 de octubre de 2011

A Una Flor Inmensa ( Alí Chumacero )


Cae la rosa, cae
atravesando el agua,
lenta por el cristal de sombra
en que su tallo ahoga;
desciende imperceptible,
clara, ingrávida, pura
y las olas la cubren, la desnudan,
la vuelven a su aroma,
hácenla navegante por la savia
que de la tierra nace
y asciende temblorosa,
desborda la ternura de su tacto
en verde prisionero,
y al fin revienta en flor
como el esclavo que de noche sueña
en una luz que rompa
los orígenes de su sueño,
como el desnudo ciervo, cuando la fuente brota,
que moja con su vaho la corriente
destrozando su imagen.
       
Cae más aún, cae
más allá de su savia,
sobre la losa del sepulcro,
en la mirada de un canario herido
que atreve el último aletazo
para internarse mudo entre las sombras.

Cae sobre mi mano
inclinándose más y más al tacto,
cede a su suavidad de sábana mortuoria
y como un pálido recuerdo
o ángel desalado
pierde una estela de su aroma,
deja una huella pie que no se posa
y yeso que se apaga en el silencio.




Mujer Deshabitada ( Alí Chumacero )


 De rosa y canto saturada,
contra el origen de tu ser sublevas
un recuerdo de labios naufragando
y la temida enemistad
de presuroso y fugitivo aroma,
bajo el silencio idéntico
a tu inútil sosiego de virgen desolada.
       
Muda fueras al tiempo, pero sabes
dejarte abandonada y te sometes
como la flor al mar,
igual que entre los labios vuela el canto,
e insiste sobre el mundo tu fatiga,
la dura soledad de tus sentidos,
suma de amor y lágrimas que mi latir inundan
de este vano sentirte agonizando.
       
Opones sólo amor y te conserva
la esperanza invencible de mi cuerpo,
como si al derrumbarte
cuando cierras los ojos y en ti misma
soportas la caricia que en inmóvil te torna,
entonces navegaras a mí y te defendieras,
ya sin saber de ti,
deshabitada flor y canto destrozado,
rescatada del mundo
y hecha estatua abatida en un invierno.



domingo, 16 de octubre de 2011

La Voz ( Charles Baudelaire )



Se encontraba mi cuna junto a la biblioteca,
Babel sombría, donde novela, ciencia, fábula,
todo, ya polvo griego, ya ceniza latina
se confundía. Yo era alto como un infolio.
Y dos voces me hablaban. Una, insidiosa y firme:
«La Tierra es un pastel colmado de dulzura;
yo puedo (¡y tu placer jamás tendrá ya término!)
forjarte un apetito de una grandeza igual.»

Y la otra: «¡Ven! ¡Oh ven! a viajar por los sueños,
lejos de lo posible y de lo conocido.»
Y ésta cantaba como el viento en las arenas,
fantasma no se sabe de que parte surgido
que acaricia el oído a la vez que lo espanta.

Yo te respondí: «¡Sí! ¡Dulce voz!» Desde entonces
data lo que se puede denominar mi llaga
y mi fatalidad. Detrás de los paneles
de la existencia inmensa, en el más negro abismo,
veo, distintamente, los más extraños mundos
y, víctima extasiada de mi clarividencia,
arrastro en pos serpientes que mis talones muerden.

Y tras ese momento, igual que los profetas,
con inmensa ternura amo el mar y el desierto;
y sonrío en los duelos y en las fiestas sollozo
y encuentro un gusto grato al más ácido vino;
y los hechos, a veces, se me antojan patrañas
y por mirar al cielo caigo en pozos profundos.

Más la voz me consuela, diciendo: «Son más bellos
los sueños de los locos que los del hombre sabio».




martes, 11 de octubre de 2011

Proyecto de Epílogo. Para la 2ª edición de "Las flores del mal" ( Charles Baudelaire )

 
 Tranquilo como un sabio, manso como un maldito, dije:
Te amo, oh mi beldad, oh encantadora mía...
Cuántas veces...
Tus orgías sin sed, tus amores sin alma,
                 Tu gusto de infinito
Que en todo, hasta en el mal, se proclama,

Tus bombas, tus puñales, tus victorias, tus fiestas,
Tus barrios melancólicos,
Tus suntuosos hoteles,
Tus jardines colmados de intrigas y suspiros,
Tus templos vomitando musicales plegarias,
Tus pueriles rabietas, tus juegos de vieja loca,
                                                      Tus desalientos;

Tus fuegos de artificio, erupciones de gozo,
Que hacen reír al cielo, tenebroso y callado.

Tu venerable vicio, que en la seda se ostenta,
Y tu virtud risible, de mirada infeliz
Y dulce, extasiándose en el lujo que muestra...

Tus principios salvados, tus vulnerables leyes,
Tus altos monumentos donde la bruma pende,
Tus torres de metal que el sol hace brillar,
Tus reinas de teatro de encantadoras voces,
Tus toques de rebato, tu cañón que ensordece,
Tus empedrados mágicos que alzan las fortalezas,

Tus parvos oradores de barrocas maneras,
Predicando el amor, y tus alcantarillas, pletóricas de sangre,

En el Infierno hundiéndose como los Orinocos.
Tus bufones, tus ángeles, nuevos en su oropel.

Ángeles revestidos de oro, jacinto y púrpura,
Sed testigos, vosotros, que cumplí mi deber
Como un perfecto químico, como un alma devota.

Porque de cada cosa la quintaesencia extraje,

Tú me diste tu barro y en oro lo troqué.
 
 


sábado, 8 de octubre de 2011

Horas ( Vicente Huidobro )

 
El villorio.

Un tren detenido sobre el llano.

En cada charco
duermen estrellas sordas
y el agua tiembla
cortinaje al viento.

La noche cuelga en la arboleda.

En el campanario florecido
una gotera viva
desangra las estrellas.

De cuando en cuando
las horas maduras
caen sobre la vida.
 


jueves, 6 de octubre de 2011

A Tientas ( Mario Benedetti )


Se retrocede con seguridad
pero se avanza a tientas
uno adelanta manos como un ciego
ciego imprudente por añadidura
pero lo absurdo es que no es ciego
y distingue el relámpago la lluvia
los rostros insepultos la ceniza
la sonrisa del necio las afrentas
un barrunto de pena en el espejo
la baranda oxidada con sus pájaros
la opaca incertidumbre de los otros
enfrentada a la propia incertidumbre
se avanza a tientas / lentamente
por lo común a contramano
de los convictos y confesos
en búsqueda tal vez
de amores residuales
que sirvan de consuelo y recompensa
o iluminen un pozo de nostalgias
se avanza a tientas/ vacilante
no importan la distancia ni el horario
ni que el futuro sea una vislumbre
o una pasión deshabitada
a tientas hasta que una noche
se queda uno sin cómplices ni tacto
y a ciegas otra vez y para siempre
se introduce en un túnel o destino
que no se sabe dónde acaba.



martes, 4 de octubre de 2011

Uno - Tango ( Enrique Santos Discépolo ) ( Música: Mariano Morés )

 
 
Uno busca lleno de esperanzas
el camino que los sueños
prometieron a sus ansias. 
 
Sabe que la lucha es cruel y es mucha,
pero lucha y se desangra
por la fe que lo empecina. 
 
Uno va arrastrándose entre espinas,
y en su afán de dar su amor
sufre y se destroza, hasta entender
que uno se ha quedao sin corazón. 
 
Precio de castigo que uno entrega
por un beso que no llega
o un amor que lo engañó;
vacío ya de amar y de llorar
tanta traición...
Si yo tuviera el corazón,
el corazón que di;
si yo pudiera, como ayer,
querer sin presentir... 
 
Es posible que a tus ojos,
que hoy me gritan su cariño,
los cerrara con mis besos
sin pensar que eran como esos
otros ojos, los perversos,
los que hundieron mi vivir... 
 
Si yo tuviera el corazón,
el mismo que perdí;
si olvidara a la que ayer
lo destrozó y pudiera amarte... 
 
Me abrazaría a tu ilusión
para llorar tu amor...
Pero Dios te trajo a mi destino
sin pensar que ya es muy tarde
y no sabré cómo quererte. 
 
Déjame que llore como aquél
que sufre en vida la tortura
de llorar su propia muerte. 
 
Pura como sos, habrías salvado
mi esperanza con tu amor. 
 
Uno está tan solo en su dolor... 
 
Uno está tan ciego en su penar... 
 
Pero un frío cruel, que es peor que el odio,
punto muerto de las almas,
tumba horrenda de mi amor,
me maldijo para siempre y se robó
toda ilusión.
 
 
 
 

lunes, 3 de octubre de 2011

Eros - Lo Fugaz ( Ricardo Jaimes Freyre )

Eros

Lluvia de azahares
sobre un rostro níveo.

Lluvia de azahares
frescos de rocío,
que dicen historias
de amores y nidos.

Lluvia de azahares
sobre un blanco lirio
y un alma que tiene
candidez de armiño.

Con alegres risas
Eros ha traído
una cesta llena
de rosas y mirtos,
y las dulces Gracias
-amoroso símbolo-
lluvia de azahares
para un blanco lirio.


................................

Lo Fugaz

La rosa temblorosa
se desprendió del tallo,
y la arrastró la brisa
sobre las aguas turbias del pantano.

Una onda fugitiva
le abrió su seno amargo
y estrechando a la rosa temblorosa
la deshizo en sus brazos.

Flotaron sobre el agua
las hojas como miembros mutilados
y confundidas con el lodo negro
negras, aún más que el lodo, se tornaron,

pero en las noches puras y serenas
se sentía vagar en el espacio
un leve olor de rosa
sobre las aguas turbias del pantano.








La Poesía ( Manuel Pacheco )



Se introduce en mi sangre:
Largo clavo de luz
que me punza los ojos,
me atraviesa la frente
y baja como un hilo de miel y de vinagre
hasta el hueco de vidrio de mi pecho.

Me golpean sus húmedas imágenes
como ríos que salen de su cauce
llevando entre sus aguas
marionetas de fango.

Y llega hasta mis huesos
su vuelo de metal,
su esquila de algodón,
su rosario de pájaros.

Es como un ave gris
volando entre la niebla.





domingo, 2 de octubre de 2011

Ahora vivo más cerca del sol ( Eugenio de Andrade) ( Versión de Aníbal Núñez )


 Ahora vivo más cerca del sol, los amigos
  no saben el camino: es bueno
ser así de nadie
  en las altas ramas, hermano
del canto exento de algún ave
de paso, reflejo de un reflejo,
contemporáneo
de cualquier mirada desprevenida,
solamente este ir y venir con las mareas,
ardor hecho de olvido,
polvo dulce a la flor de la espuma,
eso apenas.



lunes, 26 de septiembre de 2011

Pasos y Horas (Ricardo Dávila)

La calle está sola y yo voy solo
y aunque mis pies están cubiertos, sus pasos suenan solos, descalzos:
ecos de mis huellas, latidos de mi corazón que caen y se libran de mi cuerpo.

Mis pasos van,
y yo voy
montado en ellos,
dejándolos atrás, en el ayer,
en el ahora,
en este eterno caminar del tiempo sin tiempo: laberinto sin entrada.

En esta calle sola,
¿dónde está la gente,
las ventanas abiertas de música,
el jardín de pasos en el que jugaban mis pasos?

Reconozco las grietas,
las palabra del aire, las esquinas;

Yo soñé con esta calle,
yo soñé con este día,
antes de pensar sé lo que voy a pensar
me miro las manos y reconozco el mapa que hay en ellas

… sé hacia donde voy y no quiero…

Mis pasos suenan como el segundero de un reloj.



sábado, 24 de septiembre de 2011

Acaso fue la tarde ( Teresa Aburto Uribe )


Acaso fue la tarde
la que escondió en su penumbra
el sentimiento y lo durmió.

Acaso fue el cansancio
el que envolvió tanta ternura
en un colchón de sueños y lo durmió.

Acaso fue el silencio
el que atrapó al corazón
en un vacío sin ruidos y lo durmió.

Acaso fue el tiempo
el que frenó los impulsos
en un espacio sin formas y lo durmió.


Acaso fui yo
quien invitó a  "mi todo"
a aplacar la tormenta y lo durmió.




 

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Distancia Aniquilada (Orlando Tijerino, Nicaragua, 1930)


Extiende tú la mano
y mira como alcanzas la mía en la distancia;
si pareciera casi
que un volcán de kilómetros, en erupción fantástica,
se transformara en nube de cenizas,
se convirtiera en nada.

Tan cerca estás… tan lejos,
¡ que casi siento encima tu fragancia;
que casi tacto el viento que surgía
de tus manos abiertas, como pampas !

Vuelve tus ojos como quien no quiere
y encontrarás los míos en cada madrugada;
en el temblor que deja el horizonte
con cada sol que se alza;
en cada nubarrón que trasnochó en la selva
y llevó apenas una gota de agua
hasta la cara misma de la tierra
donde dejé una lágrima…

Quizá dirás entonces
que amaneció llorando la tierra abandonada!

Lanza un grito hacia el cielo
y espera… La lejana
oquedad del abismo
le hará nacer un eco a tu llamada,
multiplicada en el vacío inmenso
que habita en mi garganta…
No será más el eco de tu grito
¡ sino el alma del eco del grito de mi alma !

Ya ves, estamos lejos… Estamos cerca… Estamos juntos…
¡En medio de una enorme distancia aniquilada!




Itaca ( Constantino Cavafis )


Si vas a emprender viaje hacia Itaca,
pide que tu camino sea largo,
y rico en experiencias y aventuras.
A legistrones, cíclopes o fiero
Poseidón, nunca temas.

No hallarás tales seres en tu ruta
si alto es tu pensamiento y limpia
la emoción de tu espíritu y tu cuerpo.

Ni a los legistrones ni a los cíclopes,
ni al fiero Poseidón encontrarás nunca
si no los llevas dentro de tu alma,
si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo,.
que numerosas sean las mañanas
de verano en que arribes a bahías
nunca vistas, con ánimo gozoso.

Detente en los emporios de Fenicia,
adquiere hermosos artículos:
madreperla y coral, ámbar y ébano,
perfumes deliciosos y diversos
cuanto puedas invierte en voluptuosos
y delicados perfumes.
Visita
muchas ciudades egipcias y aprende,
con avidez aprende de los sabios.

A Itaca tenla siempre en la memoria.
Llegar allá es tu meta,
mas no apures el regreso.
Mejor que se dilate con los años
y, en tu vejez, arribes a la isla
con cuanto hayas ganado en el camino,
sin esperar que Itaca te enriquezca.
Un hermoso viaje te dio Itaca. Sin ella
el camino no hubieras emprendido.
Mas, ninguna otra cosa puede darte.

Aunque pobre la encuentres, no hubo engaño.
Rico en saber y en vida como has vuelto, comprendes
qué significan las Itacas.
 
 


lunes, 19 de septiembre de 2011

El Corazón Más Plano de la Tierra ( Roberto Juarroz)


El corazón más plano de la tierra,
el corazón más seco,
me mostró su ternura,
y yo tuve vergüenza de la mía.

Tuve vergüenza de los himnos largos,
de las constelaciones derramadas,
de los gestos nupciales y espumosos,
de las escarapelas del amor,
de los amaneceres desplomados.

Y también tuve miedo.

Miedo de las palabras que no cantan,
miedo de las imágenes que sobran
cuando tanto ser falta,
miedo de los roedores que se baten
en la iglesia vacía,
miedo de las habitaciones bautismales
que se llenan de águilas.

El corazón más plano de la tierra
me hizo aprender el salto en el abismo
de una sola mirada.



Coplas Elegíacas (Antonio Machado )


¡Ay del que llega sediento
a ver el agua correr,
y dice: la sed que siento
no me la calma el beber! 

 ¡Ay de quien bebe y, saciada
la sed, desprecia la vida:
moneda al tahúr prestada,
que sea al azar rendida! 

 Del iluso que suspira
bajo el orden soberano,
y del que sueña la lira
pitagórica en su mano. 

 ¡Ay del noble peregrino
que se para a meditar,
después de largo camino
en el horror de llegar! 

 ¡Ay de la melancolía
que llorando se consuela,
y de la melomanía
de un corazón de zarzuela! 

 ¡Ay de nuestro ruiseñor,
si en una noche serena
se cura del mal de amor
que llora y canta sin pena! 

 ¡De los jardines secretos,
de los pensiles soñados,
y de los sueños poblados
de propósitos discretos! 

 ¡Ay del galán sin fortuna
que ronda a la luna bella;
de cuantos caen de la luna,
de cuantos se marchan a ella! 

 ¡De quien el fruto prendido
en la rama no alcanzó,
de quien el fruto ha mordido
y el gusto amargo probó! 

 ¡Y de nuestro amor primero
y de su fe mal pagada,
y, también, del verdadero
amante de nuestra amada!

Me dijo una Tarde ( Antonio Machado ) de "Cantares"

 
Me dijo una tarde
de la primavera:
Si buscas caminos
en flor en la tierra,
mata tus palabras
y oye tu alma vieja.

Que el mismo albo lino
que te vista sea
tu traje de duelo,
tu traje de fiesta
.
Ama tu alegría
y ama tu tristeza,
si buscas caminos
en flor en la tierra.

Respondí a la tarde
de la primavera:

Tú has dicho el secreto
que en mi alma reza:
yo odio la alegría
por odio a la pena.

Mas antes que pise
tu florida senda,
quisiera traerte
muerta mi alma vieja.
 



domingo, 18 de septiembre de 2011

Solitario Invencible ( Vicente Huidobro )

 
Resbalando
como canasta de amarguras
con mucho silencio y mucha luz
dormido de hielos.

Te vas y vuelves a ti mismo
te ríes de tu propio sueño
pero suspiras poemas temblorosos
y te convences de alguna esperanza.

La ausencia, el hambre de callar
de no emitir más tantas hipótesis
de cerrar las heridas habladoras
te da una ansia especial
como de nieve y de fuego.

Quieres volver los ojos a la vida
tragarte el universo entero
esos campos de estrellas
se te van de la mano después de la catástrofe
cuando el perfume de los claveles
gira en torno de tu eje.
 


Piedra ( José Emilio Pacheco )

 
Lo que dice la piedra
sólo la noche puede descifrarlo.

Nos mira con su cuerpo todo de ojos
Con su inmovilidad nos desafía
Sabe implacablemente ser permanencia.

Ella es el mundo que otros desgarramos.







Sin Poesía ( Alfredo Larvergne )

 
Sin poesía,
la humanidad agoniza.

Primero mueren los poetas.

...Tardíos y solitarios...

Los dioses se echan al hombro
las máscaras.

...Sin poesía...


Quiero Volver del Viento (Manu Cancer)


Quiero volver del viento,
escrutar las palabras
y hablarte,
hablarte con mis manos llenas de cicatrices y regueros.

Quiero morir con los olivos,
silbar dentro de un grillo,
quiero morir
con los olivos.

Con el otoño intenso
me marcharé también,
seguramente caminando
por la desolación de grandes avenidas llenas de hojas,
con manos de naranjos encogidos.

Sé que voy a llorar,
llorar como hace tiempo,
llorar con los oídos, llorar con mis diez dedos,
sé que voy a llorar
hasta que me enronquezca el corazón,
hasta que yo, yo mismo,
sea otro.


sábado, 17 de septiembre de 2011

Árbol de Diana ( Alejandra Pizarnik )

 
3
Sólo la sed
el silencio
ningún encuentro
cuídate de mí amor mío
cuídate de la silenciosa en el desierto
de la viajera con el vaso vacío
y de la sombra de su sombra.
 
6
Ella se desnuda en el paraíso
de su memoria
ella desconoce el feroz destino
de sus visiones
ella tiene miedo de no saber nombrar
lo que no existe.

7
Salta con la camisa en llamas
de estrella a estrella,
de sombra en sombra.
Muere de muerte lejana
la que ama al viento.

11
Ahora
en esta hora inocente
yo y la que fui nos sentamos
en el umbral de tu mirada.
 
I

Pero a ti quiero mirarte 
hasta que tu rostro se aleje de mi miedo 
como un pájaro del borde
filoso de la noche.